Nació en el Tíbet en 1941 y, con cuatro años de edad, fue reconocido por su santidad el XVI Karmapa como la reencarnación del abad del monasterio de Dolma Lhakang. A los seis años, ingresó en el monasterio y comenzó los intensos estudios y el adiestramiento correspondientes a un tulku o lama reencarnado. Recibió instrucciones de grandes y reconocidos maestros. También realizó estudios de medicina tradicional tibetana. Desde muy joven, tuvo a su cargo un monasterio de monjes, cuatro conventos de monjas y un centro de retiros, así como numerosos discípulos laicos. A la edad de veinte años, se vio obligado, como tantos otros tibetanos, a abandonar el Tíbet; corrió numerosos peligros y grandes dificultades en su camino a la India. Una vez refugiado allí, el Dalái Lama le encargó supervisar el colegio de jóvenes tulkus en el exilio, lo que llevó a cabo durante tres años. Más tarde, junto con Chogyam Trungpa Rinpoché, marchó a Oxford, en Inglaterra, donde durante tres años trabajó realizando humildes tareas de limpieza en un hospital hasta que, debido al interés que la meditación y el budismo despertaban en los jóvenes, se trasladó a Escocia y fundó, junto con Trungpa Rinpoché, el centro de Samye Ling en el año 1967.
En 1971, Trungpa Rinpoché se trasladó a vivir y fundar centros propios en Estados Unidos, mientras que Ákong Rinpoché, a petición de su santidad el XVI Karmapa, tomó la responsabilidad de ser el abad de Samye Ling y se ocupó del desarrollo del centro y de la construcción de un nuevo templo. Además de su trabajo como director de Samye Ling y guía espiritual de todos sus centros afiliados, fundó la organización Rokpa International en 1980.
Desde 1983, fecha en que se permitió la entrada en el Tíbet a lamas tibetanos, solía pasar allí la mitad del año fundando escuelas, clínicas y proyectos de ayuda social. Asimismo, fundó Tara Rokpa, organización dedicada a las artes curativas y las terapias tradicionales y alternativas. Las diversas ramas de actividad creadas por Ákong Rinpoché están presentes en diecinueve países, con personas responsables de las organizaciones espirituales, humanitarias y terapéuticas. Los diversos grupos se reúnen una vez al año en Samye Ling para compartir experiencias, coordinar y planificar las actividades del siguiente año.
En su labor por expandir y preservar la presencia de la enseñanza de Buda, Rinpoché estableció un proyecto de recuperación de textos excepcionales antiguos y volúmenes de todas las tradiciones tibetanas. Unos treinta tulkus, khenpos y eruditos están trabajando en este proyecto de recopilación, restauración e incluso reimpresión de textos antiguos.
Fue miembro ejecutivo de la Fundación por el Desarrollo del Tíbet, organización puesta en marcha por el Panchen Lama para mejorar las condiciones del Tíbet. También fue nombrado miembro honorario de la Cruz Roja de Lhasa y Doctor Honoris Causa del Departamento de Lenguas de la universidad china de Kansu y Sichuan.
Ákong Rinpoché falleció en trágicas circunstancias en Chengdu (China) el 8 de octubre de 2013. Ha dejado un gran legado que ahora llevan a cabo sus seguidores de todo el mundo. Su hermano, Lama Yeshe Losal Rinpoché, ha asumido todas sus funciones. La vida y actividades de Ákong Rinpoché fueron objeto de una conferencia celebrada en la Universidad de Oxford en 2014, donde ponentes de todo el mundo describieron las muchas maneras en que el trabajo de Rinpoché benefició al mundo. La película “Ákong, una vida destacada” es otro homenaje a la figura del verdadero bodisatva que fue Ákong Rinpoché. La fuerza de la compasión del maestro y las plegarias de los discípulos devotos son la coincidencia necesaria para una nueva encarnación. Esperamos con amor y con paciencia su regreso.